Precauciones al comer

Dicen que comer es uno de los grandes placeres de la vida y esto lo saben muy bien los europeos. Un continente que se destaca por su variedad de exquisiteces culinarias. Sus restaurantes figuran como parte del atractivo turístico de cada rincón. Sirve como anti estrés, como premio ante un objetivo logrado, para aliviar penas, para celebrar un acontecimiento, en fin, es el acompañante perfecto para múltiples ocasiones.

Pero comer también implica riesgos, pues se trata de agentes externos que introducimos a nuestros organismos, así como nos proporcionan felicidad, se pueden convertir en una pesadilla. Esto no significa que nos privemos de dicho suministro, todo lo contrario, porque sin ello seguro pereceríamos.

En función de lo anterior, solo hay que considerar ciertas previsiones. Existen muchas variables que intervienen en ese simple acto de alimentarnos. No obstante, a grandes rasgos se debe tener en cuenta lo siguiente:

  • Variedad: cuidado con las dietas que suprimen a un grupo de alimentos, todos los tipos proporcionan algún valor a nuestro organismo, así están los que nos dan energía, los que ayudan a un buen desempeño de los órganos, cooperan con sistemas internos, preservan cualidades del cerebro, nos protegen aumentando las defensas, y algunos hasta contribuyen a embellecernos. Incluso a ciertos alimentos se les atribuyen propiedades curativas.
  • Calidad: independientemente de lo que consumimos, debe prevalecer la calidad. Esto es en cuanto al estado de conservación, tipo de materia prima, nivel de cocción, etc., es decir, que se cumplan los niveles apropiados de tratamiento durante toda la cadena de producción y empacado, para que estén aptos para el consumo.
  • Cantidad: uno de los aspectos que menos se les presta atención, pero resulta clave para llevar una dieta adecuada. Esto tiene que ver con las porciones que se deben tomar, así como también su frecuencia. Se mencionaba anteriormente, que es favorable la ingesta de los diferentes tipos de alimentos, pero hay que entender la proporción y el momento del día que resultan convenientes.

Es fundamental en medio de todo esto la inocuidad alimentaria, que no es más que cuidar las condiciones y la manipulación para evitar la contaminación, en consecuencia prevenir enfermedades, alergias, intoxicación.

Quienes expenden alimentos empacados están en la obligación de colocar la información pertinente en la envoltura, como la tabla de nutrición, fecha de vencimiento, indicaciones, alertas (si aplican) y si posee algún tipo de certificación de calidad.

Para todo el sector alimenticio están diseñadas las normas ISO 9001/22000, que abarcan los estándares ideales en todas las etapas involucradas. Por ende, si vamos a un restaurante que exhibe dicho certificando, tendremos la seguridad que no corremos peligro al consumir sus productos.

Post A Comment