La Selva Negra en Alemania
La Selva Negra: porque un macizo montañoso no puede estar más rodeado de cultura
Si vas a Alemania y preguntas por los senderos más sombríos de la historia, puede que la referencia que recibas sea la de la Selva Negra. Aunque en un principio no te interese visitar una selva sombría, si preguntas un poco más tendrás pistas sobre uno de los lugares que ejemplifican parte de las características de la cultura alemana. Nunca conviene quedarse con la primera opinión y de ser necesario, lo mejor es visitar.
La selva negra es un vasto bosque que se caracteriza por ser denso y macizo. Esto le da las características de ser sombrío aunque es muy variada en vegetación y en fauna. Se podría decir que es un tesoro ecológico alemán. El nombre de selva negra se usa para referirse a este bosque desde hace unos cientos de años, a partir de las características sendas sombrías que le preceden aunque en su época tuvieron relevancia comunicacional.
La cultura formada en la localidad circunda a la imagen del bosque. Muchos de los elementos autóctonos característicos tienen un eco de lo que es la selva negra y por tanto es su base de identidad. Los pobladores tienden fuertemente a ser conservadores y mantienen viva las tradiciones desde hace casi un milenio. De una recorrida identidad nacen también elementos diferenciadores que tienen un gran atractivo turístico.
Todos conocemos los relojes Coco, y conviene saber que proceden de la cultura de la localidad circundante de la selva negra. Para el turista que visite el lugar, puede acudir al museo de relojes que además de exhibir múltiples ejemplares de este icónico reloj, también lo hace de otros modelos de distintos tamaños y características. El museo se llama Museo Alemán de Relojes. Otros museos de igual interés incluyen el de Trompetas, el de Vitrales, el Centro de Arte y Tecnología Mediática y las Casas Campesinas, que además recrean la vida rural de la edad media alemana.
