Consejos para afrontar mejor la época de exámenes

La cuesta de Enero es un periodo que cubre todo el primer mes del año, y en el que la vida se nos hace un poco cuesta arriba y necesitamos de un esfuerzo extra para sacar adelante diversos asuntos, la mayoría de ellos relacionadas con los excesos de Navidad. Por ejemplo, si gastamos demasiado en Navidad, luego Enero será un mes complicado económicamente (algo menos gracias a las rebajas). Si hemos comido o bebido mucho, seguramente hayamos cogido algunos kilos de más que queramos perder, pero nos costará también volver a hacer ejercicio y a comer sano como antes.

Y tras la Navidad se presenta también la temible época de exámenes universitarios, que suelen comenzar a finales del mes de Enero, y que requieren semanas de estudio. Por eso, en el sentido lectivo, el mes de Enero también se nos hace cuesta arriba. En muchos casos, los exámenes están muy juntos y es imposible estudiarlos uno a uno entre ellos, por lo que hay que prepararlos todos en las semanas previas, lo que supone un gran esfuerzo para nuestra mente. Por eso hay que saber enfrentarse a estas épocas tan duras de estudio durante horas, para conseguir el máximo provecho del mismo y los mejores resultados.

Lo primero que debemos hacer es estudiar en un ambiente propicio para ello, es decir, en un sitio en donde podamos concrentrarnos correctamente, tranquilo, donde nos sintamos cómodos y podamos pasar horas sin que nos molesten. Hay quien estudia mejor en grupo, o en bibliotecas, cada cual tiene su lugar, pero lo más recomendable es hacerlo solo y en casa, o al menos en la mayoría de ocasiones. Tener unos buenos apuntes, limpios y organizados, nos va a ayudar mucho. Realizar un planning cuando haya mucha tarea por estudiar, y tratar de cumplirlo al máximo, también será una de las cosas que más nos puedan servir para lograr nuestro objetivo.

Los exámenes están cerca y muchos se agobian con esto, así que también es importante mantenerse lo más tranquilo posible, alejarnos de todo el stress externo, ya que es inevitable sentirlo por los exámenes. Controlar nuestros nervios con tilas o infusiones puede ser una buena opción.

Post A Comment