Las personalidades borderline son difíciles de identificar, a medio camino entre psicosis y neurosis, las personas afectadas parecen completamente normales. Sin embargo, ciertos síntomas son visibles, en particular los problemas emocionales, irritabilidad, ansiedad, cambios de humor e incluso depresión, sin contar con la falta de confianza en uno mismo y auténticas dificultades en las